Descripción
¿Y si correr no tuviera que ser aburrido? ¿Y si no fuera necesario sufrir? ¿Y si el mindfulness mejorara tu rendimiento? ¿Y si la energía pudiera multiplicarse con la imaginación?
¿Y si el runfulness fuera la explicación?
Hasta ahora has mirado con una mezcla de lástima y admiración a esa especie rara de runners a medio camino entre masoquistas o valientes.
Hasta ahora has corrido con tus piernas, unas veces te han llevado lejos y otras te han abandonado.
Hasta ahora has avanzado con la fuerza de voluntad, muchas veces te ha aportado el éxito y otras la frustración.
Te han hablado de los beneficios del running para la salud.
Sin embargo, no te han contado que correr puede ser un viaje apasionante hacia tu transformación interior.
Te proponen programas basados en el esfuerzo y la técnica.
Sin embargo, no te han contado el papel de las emociones, la imaginación y la consciencia.
Te han explicado la satisfacción que aporta el resultado.
Sin embargo, no te han contado que correr es parte del camino.
Te han enseñado cómo medir los kilómetros y los tiempos.
Sin embargo, no te han enseñado a visualizarte volando o a estimular los sentidos de tu cerebro.
No esperes que al finalizar el libro dejes de forcejear con las tentaciones y tus piernas te lleven al asfalto sin rechistar.
Entonces, ¿qué ganas leyendo?
El Método Walden te descubrirá cómo:
- Moldear la respiración en función de la intensidad del running.
- Asociar un antídoto a los disfraces mentales de la fatiga y la pereza.
- Calmar tu mente con la meditación.
- Conectar tus sensaciones y emociones con el movimiento.
- Correr en estado de relajación concentrada con el mindfulness activo.
- Mejorar la técnica de carrera fusionando la respiración y el lenguaje corporal.
- Desplegar mantras que sugestionen a tu cerebro.
- Empoderar tu imagen corporal con las visualizaciones.
- Correr en modo Runfulness conectando corazón, mente y cuerpo.
“El Runfulness ha transformado mi vida radicalmente, paso a paso, kilómetro a kilómetro, ha ido despertando mi espíritu y abriendo mis ojos a un mundo lleno de sensaciones. Ha surgido dentro de mí una ansiedad nueva por aprender, disfrutar y, en definitiva, vivir.”
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