Reto 3 Visualización

“Los grandes logros surgen cuando la mente está tan silenciosa y tranquila como un lago de cristal.” W Timothy Gallwey,

        Cuenta Robert S. Sharma que existen unos monjes llamados “los Sabios de Sivana” que para su crecimiento físico, mental y espiritual acuden a un lago misterioso que hay en el Himalaya. Se sientan al borde del mismo y observan la superficie mientras proyectan mentalmente las imágenes de quienes quieren llegar a ser, sus sueños personales.  Tras  veinte minutos observando su  reflejo vuelven a sus casas convertidos en esa imagen. (“El monje que vendió su Ferrari”)

¿Quieres correr como un Keniata o como un guepardo? Suéñalo.

 Los pensamientos son mensajeros que enviamos al:

• Interior: para que nuestras células se preparen para ejecutarlos.
• Exterior: para transmitan al mundo nuestra intención.

            El Entrenamiento Virtual en el Running

1. Proyecta todas las noches, con la mente en calma, la imagen del RUNNER que quieres ser.
2. Visualízate corriendo así: Añádele emoción a la escena, inyéctale con todos los sentidos y dibújale una sonrisa de satisfacción de conseguirlo.
3. El subconsciente no distingue entre la realidad y la ficción e irá construyendo poco a poco esa creencia
4. Tus piernas darán los pasos necesarios para su realización.

La realidad no es más que el producto de nuestra mente. Si ésta es negativa generará un entorno negativo y si es positiva te lloverán los buenos momentos, serás una persona con suerte.    

            Mi Historia.
        Hace ya muchos años leí los consejos de estos sabios y decidí escribir un diario con mis sueños, entre ellos el primero siempre fue mi Running. Me proyectaba por las noches corriendo con la cabeza mirando al cielo, el aire acariciando mi cara y una sonrisa como la de Harold Abrahams  en la película Carros de Fuego .
        Pasaron los años y mi diario se quedó olvidado en un cajón.
            En el 2016 repasando recuerdos en un ataque de sentimentalismo me tropecé con ese diario de carreras y de sueños y se me saltaron las lágrimas porque en un segundo comprendí que de aquellos garabatos sin apenas esbozar había salido, entre otras cosas personales que no vienen a cuento comentar:
            Mi PROYECTO WALDEN.
         Mi corazón le había estado pidiendo en silencio a mi mente que me construyera esa realidad y ésta se lo tragó dirigiendo mis pasos hacia ello.

             Busca en tu corazón esa imagen buena, fuerte, sana, alegre y llena de energía.
            Proyéctala por las noches en la superficie de tu lago imaginario  (en tus ensoñaciones, en tus carreras, en tus paseos) y tu mente poco a poco irá mostrándote esa realidad, que eres tú, pero habías olvidado.